martes, 18 de julio de 2017

TRUCOS para hacer FOTOS BAJO EL AGUA

En verano es la época idónea para decidirnos a hacer una sesión de fotos bajo el agua, en la playa o en la piscina. A todos nos llama la atención y cada vez es más frecuente. Hoy en día muchos móviles nos permiten hacer fotos bajo el agua y ya hay también cámaras sin necesidad de carcasas. 
De todos modos, hay factores importantes a tener en cuenta para conseguir fotografías chulas en inmersión. 
Empiezo por comentar los dos sitios más comunes donde podríamos hacerles, en la Playa o en la Piscina.

En el MAR, si es donde hemos finalmente decido hacer la sesión, tenemos que asegurarnos que esté tranquilo, sin muchas olas (marea baja) y sin mucho movimiento. Preferiblemente en zona de rocas con poca arena para evitar que se levante al tocarla con los pies y nos pueda estropear la toma.
Aquí podemos incluir ríos, lagos, pantanos…
En la PISCINA, cuanta menos gente esté dentro mejor, pues estará más nítida y transparente. Se puede utilizar fondos (negro o color) si queremos dar mayor énfasis o simplemente utilizar el fondo de la piscina; OjO con los azulejos rotos, desagües… buscar siempre el mejor encuadre para eliminar las imperfecciones.
Evitar aquellas con exceso de cloro, si lo que queremos son fotos donde la mirada sea importante.

Factores a tener en cuenta:
La LUZ: Si normalmente cuando hacemos cualquier tipo de foto es importante, bajo el agua lo es aún más. Hay que intentar que la sesión se realice en días claros, todo rayo de luz que se pueda aprovechar bajo el agua será muy útil. A tener en cuenta que cuanto más profundo estemos, menos luz tendremos.

La RESPIRACIÓN. Es muy difícil aguantar la respiración y poner “cara de foto”. Para ello hay que practicar y conseguir un buen aguante bajo el agua para acostumbrar a relajar el cuerpo y la cara y conseguir fotos más naturales
Si es complicado relajar la expresión de la cara, podemos recurrir a cubrir parte de su rostro con las manos, el brazo, el pelo, telas… e incluso a dejar la cabeza fuera del agua, jugando así con el reflejo en el borde.

Los ATREZZOS o elementos necesarios son infinitos… la imaginación es el
límite. Podemos partir desde las más naturales y al desnudo a sesiones con los elementos específicos a la temática elegida, a todo tipo de vestidos o telas. Aquellos tejidos vaporosos, traslúcidos dan mucho juego, asimismo, cuanto más ligeras, mayor libertad de movimientos.

Y por último hay que tener mucha PACIENCIA y GANAS. Este tipo de fotografía requiere de mucha perseverancia y tiempo para conseguir las posturas / facciones y obtener efectos y resultados buscados, pero una vez conseguidos son una gran recompensa al esfuerzo.

Las posibilidades son infinitas, y la espectacularidad de los fondos realza la imagen convirtiéndola en auténticas obras únicas. ¿Te atreves?